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Descripción archivística
Nieva, Ángel Luis Argentina
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Colección Agencia Federal de Inteligencia 01

  • AR-ANM-AFI01
  • Colección
  • ca 1979 septiembre-1980 febrero

La colección está constituida por un único documento cuyo productor es la Jefatura II de Inteligencia de Ejército, identificado por el símbolo que figura en sus primeras hojas.
La fecha de producción no figura en el documento pero, luego de un proceso de indagación, se encontraron dos marcas que permiten brindar un intervalo temporal en el que, casi con certeza, habría transcurrido la confección del documento. La primera referencia temporal la dan los registros de las salidas del país de las personas “opcionadas” que se incluían en el listado, que podía ser contrastada con los decretos del PEN emitidos entre los años 1974 y 1983, es decir, durante la vigencia del Estado de Sitio. Se observa que las “opciones” de personas incluidas en el álbum se detienen hacia el final del mes de agosto de 1979. Por lo tanto, es posible inferir que el documento fue elaborado con posterioridad a esa fecha, es decir, a partir de septiembre de ese año. La otra huella sobre el momento de producción del documento se vincula con la inclusión en el mismo de varios y varias participantes de la segunda Contraofensiva de Montoneros, desarrollada entre enero y febrero de 1980. Dado que el álbum tenía como finalidad primordial la captura de militantes que todavía permanecían con vida, la presencia de 17 protagonistas de la acción impulsada por la organización armada peronista -entre quienes retornaron a la Argentina desde el exilio y quienes conformaron los grupos de apoyo en el país- permite suponer que el documento habría sido elaborado con anterioridad al desarrollo de la segunda fase de la Contraofensiva.
El álbum presenta la información como de carácter confidencial y pena su divulgación según los artículos 222 y 223 del Código Penal vigente entonces. Restringe su utilización a miembros de las Fuerzas Armadas, Fuerzas de Seguridad y organismos del Estado debidamente autorizados para ello, para ser utilizado como "elemento de orientación y no de prueba". Contiene 517 imágenes: 12 referidas a materiales, 362 que corresponden a 338 hombres y 143 que pertenecen a 139 mujeres. Entre los números que identifican a los hombres (que van del 1 al 362) y las mujeres (que van del número 1001 al 1143) existe un salto en la correlatividad.
El documento se encuentra dividido en tres partes: una primera con los retratos de las personas calificadas como "delincuentes terroristas" (DT); una segunda parte con dos listas de los "DT por orden de foto" y "DT por alfabético" en las cuales se detallan los nombres completos, alias, documentos de identidad y letras cuyas referencias aparecen al final; y una tercera parte con "fotografías y características de equipos, material, embalaje y coberturas utilizados por los DT". Este álbum estaba pensado para ser actualizado y completado periódicamente y se detallan allí las indicaciones acerca de cómo hacerlo. Hacia el final del documento se encuentra una lista con referencias de las letras utilizadas a lo largo del álbum para indicar pertenencia a organizaciones políticas, denominadas según este documento "BDT" bandas de delincuentes terroristas, así como una mención a si las personas fueron "expulsadas" o con "derecho de opción a salir del país durante el estado de sitio".
Con respecto a las fotografías, mediante su contrastación con otros acervos y también a través de los intercambios con sus titulares al momento de la restitución de su foto, se pudo determinar el origen de algunas de ellas: registros policiales, cédulas de identidad y pasaportes, legajos laborales, fichas de ingreso a unidades penales durante procedimientos de legalización de detenciones clandestinas y fotografías personales confiscadas en el marco de allanamientos. Asimismo, se identificaron fotografías similares al acervo documental identificado como "Registro de extremistas de Córdoba".
Respecto de la circulación de este álbum dentro de las Fuerzas Armadas y de Seguridad como fuente de información, corresponde destacar la existencia de algunas de sus páginas dentro de un documento del fondo de la Dirección de Inteligencia de la Provincia de Buenos Aires. Estas páginas pueden encontrarse en el Legajo 37127, Mesa DS, Factor Policial, Material relacionado con Montoneros. Años 82, 83 y 84. Tomo I, utilizadas como material de trabajo dentro de otro documento que recopilaba información vinculada a Montoneros, dentro del capítulo XVI como un listado de “terroristas con indicación de opcionados/expulsados”. Se evidencia en sus páginas la actualización, escrita a mano, del estado de situación de las personas que figuraban allí: “fallecido”, “abatido”, “desaparecido”, “detenido exterior”.
En relación a la circulación en el exterior del país, corresponde destacar la utilización que se hace en el mismo del término “Delincuente Terrorista” y de las siglas “DT” y “BDT”, la primera alusiva a “Delincuente Terrorista” y la segunda a “Banda de Delincuentes Terroristas”. En una rectificación del “Plan de capacidades de la Armada Argentina” de 1975, normativa empleada por dicha fuerza para llevar adelante la “lucha contra la subversión”, se indica que las expresiones “DT” y “BDT” se emplearán cada vez que exceda el marco específico de la institución y se dirija hacia los públicos externos, mientras que “DS” y “BDS” –siglas correspondientes, respectivamente, a “Delincuente subversivo” y “Banda de Delincuentes Subversivos”– serán los términos correspondientes cuando no sobrepase el nivel específico de la institución. Por su parte, debe mencionarse que se encontraron páginas similares al álbum remitidas por el Jefe de la Policía de Asunción a su homólogo del Departamento de Investigaciones –área responsable de las tareas de inteligencia– en una nota fechada el 1 de diciembre de 1979 . En dicha comunicación se reproducía textualmente un fragmento de otra nota que había sido enviada junto con las copias del listado desde el II Departamento del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Paraguay. El texto permite suponer que los militares paraguayos tenían en su poder la totalidad del álbum fotográfico e, incluso, participaban en las tareas de actualización de su contenido.

Argentina. Agencia Federal de Inteligencia (AFI)

Ficha sobre Juan Enrique Roldán, Ángel Luis Nieva, Alcira Florinda Risso de Rodríguez y Osvaldo Jesús Caldú

Ficha manuscrita con información sobre la detención de Juan Enrique Roldán, Ángel Luis Nieva, Alcira Florinda Risso de Rodríguez y Osvaldo Jesús Caldú. Contiene información personal como edad, ocupación, fecha y lugar de nacimiento; y datos sobre el secuestro, fecha, agentes a cargos de los operativos, lugar de detención.

González Gartland, Carlos A.

Sección Comisión Argentina por los Derechos Humanos

Esta sección reúne documentos de la Comisión Argentina de Derechos Humanos (CADHU) recopilados por Carlos González Gartland en el marco del cumplimiento de sus misiones, funciones y actividades en dicha organización. La CADHU se gestó durante los meses previos al golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, aunque su aparición formal se produjo cuando ya había comenzado la dictadura, en abril de 1976. La CADHU se fundó a partir de la confluencia de distintos grupos. El más numeroso lo componían las y los militantes del Partido Revolucionario de los Obreros Argentinos (PROA), organización a la que pertenecía, entre otros, Carlos González Gartland. La denuncia y la solidaridad se constituyeron tempranamente como las dos vías de acción principales de la CADHU. Los acuerdos logrados entre el sector vinculado al PROA y los representantes de la organizaciones político-militares fueron fundamentales para llevar adelante la primera de esas iniciativas, que se canalizó a través de Ignacio Ikonikoff, encargado de centralizar los datos aportados por los colaboradores vinculados a Montoneros y el PRT-ERP. De este modo, se constituyó un primer circuito de información que permitía conocer y denunciar con cierta celeridad los secuestros y asesinatos que se multiplicaban diariamente en el país durante los primeros meses de dictadura, y de los que los militantes relacionados con las organizaciones político-militares formaban un porcentaje considerable.
La denuncia en el extranjero fue desde el inicio una prioridad para la CADHU, cuyos integrantes –por su experiencia en la defensa de presos políticos– habían entablado vínculos tempranos con diversas entidades internacionales del campo jurídico ligadas a la defensa de los derechos humanos. Esta proyección hacia el ámbito internacional de la CADHU no sólo respondía a consideraciones de estrategia sino, también, a las urgencias que planteaba el avance de la represión en la Argentina. La información que se recogía en la Argentina sobre el avance de los secuestros, las desapariciones y los asesinatos en la vía pública salía del país inicialmente a través del circuito organizado en torno a Ikonikoff. Durante el primer año de dictadura, él fue el encargado de enviar con cierta periodicidad cartas a los representantes de la CADHU en el exilio en las que recopilaba numerosos datos sobre el avance de la represión en la Argentina e informaba también sobre la cotidianidad del organismo.
La CADHU estableció representaciones en diversos países de Europa Occidental y América, entre ellas la delegación del organismo en México, encabezada por el abogado Carlos González Gartland, quien desarrolló su militancia en la CADHU en paralelo a su participación en el Comité de Solidaridad con el Pueblo Argentino (COSPA).
Una de las actividades fundamentales asumidas por la CADHU fue la de denuncia a través de la producción y difusión de relatos del cautiverio elaborados por sobrevivientes de centros clandestinos de detención. La circulación de este tipo de documentos en el extranjero tenía como objetivo principal lograr la condena internacional de la Junta Militar por las graves violaciones a los derechos humanos que se cometían en la Argentina. Estos relatos, que narran de manera detallada el horror de la represión clandestina, constituyeron un insumo clave del movimiento antidictatorial en su campaña de denuncia y, además, generaron un conocimiento temprano sobre el dispositivo represivo que sería clave en el escenario judicial de la transición democrática. Los testimonios reunidos no solo son los producidos por la CADHU sino también algunos recopilados por Gartland y reunidos en un mismo corpus.
Además, esta sección reúne diversas publicaciones de la CADHU en las que se denunciaban los crímenes de la dictadura, una de las cuales, por ejemplo causó un gran impacto en el terreno de la denuncia internacional: ""Proceso al Genocidio"". Se trata del primer informe integral sobre las violaciones a los derechos humanos en el país. Editado en Madrid gracias a las gestiones del cineasta español Elías Querejeta, el libro fue redactado por Eduardo Duhalde y Gustavo Roca, pero su insumo fundamental fue la información que integrantes y colaboradores de la CADHU habían obtenido clandestinamente en la Argentina y, luego, sacado del país por distintas vías. El informe no sólo denunció los crímenes dictatoriales como parte de un genocidio, apelando así a una figura instalada en el derecho penal internacional, sino que además acuñó la noción de “terrorismo de Estado” para describir el esquema represivo montado por la Junta Militar. También hay una multiplicidad de comunicados de denuncia de diverso tipo como los comunicados de prensa o los llamados ""Acción urgente"".
La sección cuenta además con correspondencia que da cuenta de los vínculos de la CADHU con otros organismos de derechos humanos y de las actividades e iniciativas de solidaridad que buscaban dar auxilio a las personas que huían de la persecución dictatorial así como de las intervenciones en el espacio público que consistieron fundamentalmente en movilizaciones ante las embajadas argentinas en los países del exilio ante eventos puntuales o fechas de resonancia particular, como los aniversarios del golpe de Estado.
Finalmente, hay rendiciones de egresos mensuales de la sede México de la CADHU cada uno de los cuales se encuentra acompañado por la misiva dirigida al Consejo Directivo de la CADHU en Madrid y, en algunos casos, un detalle de las líneas de acción de la delegación.

González Gartland, Carlos A.

Testimonios de la Comisión Argentina de Derechos Humanos

Esta serie reúne documentos vinculados a la participación de Carlos González Gartland en una de las modalidades fundamentales que asumió la actividad de denuncia de la Comisión Argentina de Derechos Humanos (CADHU) durante la última dictadura cívico militar argentina: la producción y difusión de relatos del cautiverio elaborados por sobrevivientes de centros clandestinos de detención. La circulación de este tipo de documentos en el extranjero tenía como objetivo principal lograr la condena internacional de la Junta Militar por las graves violaciones a los derechos humanos que se cometían en la Argentina. Estos relatos, que narran en primera persona y de manera detallada el horror de la represión clandestina, constituyeron un insumo clave del movimiento antidictatorial en su campaña de denuncia y, además, generaron un conocimiento temprano sobre el dispositivo represivo que sería clave en el escenario judicial de la transición democrática.
La CADHU comenzó con la difusión de testimonios durante el primer año de dictadura. Gracias a sus contactos con distintas organizaciones revolucionarias, el organismo logró acceder de manera veloz a los relatos de militantes que habían sobrevivido al cautiverio clandestino, ya sea por medio de la liberación o la fuga de sus captores. Estos testimonios, que los miembros de la CADHU sacaban clandestinamente del país para su publicación, fueron recopilados luego en una sección del informe Argentina: Proceso al Genocidio, editado en Madrid en marzo de 1977.
El traslado de las estructuras del organismo al extranjero como producto de la represión y el exilio de sobrevivientes de distintos centros clandestinos se combinaron para generar un salto cualitativo en el trabajo con los testimonios, cuyos resultados comenzaron a hacerse visibles a partir de 1979. Desde fines de ese año y hasta el final de la dictadura, la CADHU publicó relatos del cautiverio en un nuevo formato que incluía, además de una extensión mayor que los precedentes, la organización de su contenido en distintos subtítulos temáticos y la incorporación de recursos como planos del centro clandestino y listados con los nombres y apodos de las víctimas y los victimarios.
Los documentos de esta serie dan cuenta del trabajo que realizó González Gartland como representante de la sede de la CADHU en México. Los documentos que la conforman no se reducen sólo a los testimonios editados por el organismo. También hay otros que llegaron a manos de Gartland a través de sobrevivientes o de distintas entidades del movimiento antidictatorial que, por pedido de los propios testimoniantes, no estaban destinados a la circulación pública, aunque sí servían como base a denuncias más amplias que realizaba el organismo en distintos foros de derechos humanos. Entre los testimonios editados, no sólo figuran los que fueron producidos en México a través de las gestiones de González Gartland. Hay, además, ejemplares de relatos publicados en otros países donde la CADHU tenía sedes, en particular, España, Francia y, en menor medida, Estados Unidos. Esto da cuenta de los intercambios que existían entre el productor Fondo y las y los integrantes del organismo radicados en otras latitudes. Finalmente, algunos de los testimonios que componen esta serie son extractos de testimonios que no se encuentran completos. Se incluye también una lista de testimonios elaborada por Carlos González Gartland.